Básquet
Fueron muchos los jugadores y son muchas más, las historias para contar acerca de los años dorados del básquet de Gimnasia.
El regreso a la Federación de Básquet Área Metropolitana de Buenos Aires es toda una sensación para el deporte en Gimnasia, ya que significa rememorar las etapas más gloriosas de la historia del básquet Tripero. La decisión de retornar a Febamba implica también hacer memoria y volver a recordar tiempos dorados.
Jugar en Federación Capital durante tantos años implicó tener que viajar seguido desde La Plata hacia los distintos puntos de la provincia de Buenos Aires para representar a Gimnasia en cada cancha. Desde las categorías de Mini Básquet hasta la Primera División, son múltiples las historias de quienes vistieron los colores Triperos.
Fabián Crivaro fue uno de los tantos basquetbolistas que se calzaron la camiseta de Gimnasia desde tan temprana edad. En 1974, cuando el Mens Sana formó parte de un grupo de Clubes que decidieron fundar Febamba, Crivaro jugaba en las categorías Menores.
“Son muchas las vivencias, los viajes. Desde Mini hasta Juveniles generalmente jugábamos siempre los mismos entonces nos uníamos mucho”, destacó Fabián. Luego agregó: “todos tenían su lugar y quienes llegaban se adaptaban al grupo. Recuerdo a Roberto Bianchi, Carlos Bucci, eran formadores de personas y entrenadores de gran nivel”.
Para el campeonato en que Gimnasia se consagró en 1979, Fabián Crivaro formaba parte del plantel campeón de Federación Capital y el Torneo Argentino, como representante de la cantera Mens Sana. “Jugar con esta camiseta siempre era un plus”, cerró.
Otro de los tantos triperos que vistieron la camiseta de Gimnasia fue Alejandro Allegretti, jugador del Club entre 1977 y 1988 y que luego volvió a la Institución para disputar el TNA en 1994. Allegretti también rememora sus recuerdos más lindos en sus inicios en la Institución, remarcando los valores que le transmitieron desde pequeño y que aún perduran en el tiempo.
“Llegué a Gimnasia en Infantiles con 8 años y todavía nos seguimos juntando con el grupo, nunca pudimos salir campeones, pero siempre peleábamos los torneos. Recuerdo salir bien temprano y volver a la noche a mi casa, jugar en mi categoría y en una más grande, compartíamos todo el día”, destacó Alejandro, emocionado.
Respecto a los valores que el Club le dio, el exbasquetbolista aseguró que “Gimnasia te marca como persona”. “Roberto Bianchi jamás te levantaba la voz y con una mirada te enseñaba más que con mil palabras. Le encantaba ganar, pero antes que todo estaba la persona, saber compartir”, remarcó.
Guillermo Borgoña, jugador del Club categoría ’83 y que compartió muchos años con Nicolás Gianella, también quedó atravesado por un montón de sentimientos al hablar de Gimnasia y sus inicios en la Institución. “Recuerdo llegar al Polideportivo y ponernos a jugar a las escondidas antes del entrenamiento, los fines de semana cuando viajábamos, nos reíamos, jugábamos y nos divertíamos muchísimo”, aseguró.
“Gimnasia me enseñó el respeto, la solidaridad, el sacrificio, el compromiso por esta camiseta y la humildad, yo pasé los mejores momentos de mi infancia y mi adolescencia dentro del Club”, luego agregó Guillermo.
En 1998 y ya con la decisión consumada de no participar más en Federación Capital varios años antes, Guillermo Borgoña ganó la Copa Arana al mejor deportista del año. “Estaba en el Club que soy hincha, haciendo lo que amaba, vistiendo y defendiendo la camiseta, fue una alegría imposible de describir”.
Para cerrar, Borgoña no dejó de mencionar a Nico Gianella, una de las figuras del equipo que actualmente juega en la Liga Argentina y emblema del básquet nacional. “Nico era un crack, un distinto. Soy un agradecido de haber compartido tanto con él y sin dudas, un ejemplo a imitar. Una vez en cadetes, hizo 63 puntos en un mismo partido. Una locura, ja”, cerró.
