La del lunes 27 de diciembre fue una tarde muy especial para Mati Miranda y es que, a pocos meses del segundo aniversario de su debut en Primera, firmó la renovación de su contrato con Gimnasia, institución que lo vio nacer, crecer y convertirse en una pieza clave del engranaje de Primera. En este sentido, el Pibe Lobo de 21 años, dueño de una herencia Tripera intachable, llegó al Tripero cuando tenía tal solo seis años para iniciar una larga carrera que a fin de cuentas lo encontraría destacándose en cada etapa formativa hasta llegar a ser una pieza recurrente en el plantel de Primera.

Enganche por vocación y dueño de una zurda de seda, su fútbol fue cambiando y evolucionando a medida que atravesó cada instancia en el Club. El enganche tradicional le fue dejando el lugar a un volante completo que, sin la necesidad de dejar de crear juego y sacar provecho de la calidad en el manejo de la pelota, era capaz de recorrer la banda o incluso cerrarse para ser volante interno y colaborar con la marca. Ese progreso lo llevó a ser líder dentro del campo en su camada, portando la cinta de capitán, y al mismo tiempo empezar a cimentar un firme paso por la Reserva Mens Sana.

Tras varios años de aprendizaje dentro del fútbol formativo de la institución, llegó el momento de dar el salto más especial. No solo en el plano personal, sino también en términos familiares, teniendo en cuenta la gran identificación, prácticamente desde la cuna, de cada integrante del pasional núcleo Miranda. El momento llegó el 28 de septiembre de 2019, cuando el eterno Diego Armando Maradona dispuso su ingreso en un Bosque repleto por el Pueblo Tripero, que se había acercado para alentar al Lobo en su partido frente a River por la Superliga Argentina de Fútbol.

Luego del cotejo que dio origen a su carrera profesional, logró una nueva meta para todo joven futbolista, esto es afianzarse en el plantel superior. Desde entonces, Miranda sumó más de 30 partidos partidos en la Primera del Lobo, vistiendo la camiseta del club de sus amores y convirtiéndose en una pieza importante para cada uno de los cuerpos técnicos que trabajaron al mando. Tal ha sido y, por supuesto, es su trascendencia que durante la tarde del lunes, su vínculo contractual con Gimnasia fue renovado hasta el 31 de diciembre de 2024.

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